Palacio Medici-Riccardi |
Michelozzo Michelozzi fue quien sentó las bases de la arquitectura
civil del Renacimiento llevando a cabo el palacio Medici-Riccardi en 1444, mandado
construir por Cosme el Viejo (perteneciente a la familia Medici), y que está
ubicado en la que era la Vía Lata (hoy Vía Cavour) de Florencia. Fue una renovación
tipológica, ya que se abandona la idea de fortaleza que había hasta el momento
y que provenía de la Edad Media.
Planta |
Es una construcción completamente armoniosa y proporcionada.
La fachada consta de tres pisos que están delimitados cada uno de ellos por una
línea de imposta, y cuya altura va disminuyendo progresivamente de abajo a
arriba. Lo mismo pasa con la profundidad del almohadillado que en la parte
superior es mucho más suave que en la parte inferior.
El edificio esta rematado por una cornisa apoyada en ménsulas
diseñada a partir de modelos clásicos, lo que deja ver que Michelozzo se
inspiro en la arquitectura de la antigüedad.
Patio del palacio |
La planta del palacio se organiza en torno a un patio
central interior por donde entra la luz y el aire a las dependencias. Este patio
se articula a través de cuatro crujías con tres arcos en cada una. Era en este
espacio del edificio donde Cosme el Viejo y su nieto Lorenzo el Magnífico
acumularon esculturas de época clásica para que los artistas que dieron origen
al renacimiento viniesen a estudiarlas.
Capilla de los Magos |
Cabe destacar la capilla de los Magos, con unas medidas
relativamente pequeñas, pero con un rico techo artesonado y sillería de madera.
En dicha capilla aun se conservan los frescos realizados por Benozzo Gozzoli en
1460.
En 1659 paso a manos de la familia Riccardi, que lo reformó,
prolongando en siete ejes la parte frontal del edificio. Fueron los miembros de esta misma familia
quienes vendieron en 1814 el palacio al estado. Actualmente es la sede del consejo
provincial.
En conclusión el Palacio Medici-Riccardi sentó las bases
para los palacios toscanos del Renacimiento, como es el caso del Palacio
Rucellai de Alberti o el Palacio Pitti de Brunelleschi.